viernes, 2 de octubre de 2015

CARTA DE UNA DOULA A UNA MUJER...

Querida mujer,

Hemos hablado por teléfono hace poco, pero he sentido la necesidad de escribirte. Espero que no te parezca un atrevimiento excesivo por mi parte, pero creo que es importante que sepas ciertas cosas.

Como sabes soy Doula. Y me has llamado para que esté en tu parto, algo que me llena y me hace sentir muy feliz. Pues la maternidad es mucho más que mi trabajo, es mi vida. 
Lamento haber tenido que decirte que no podría estar como deseabas, pero es que lo que tú buscas para tu parto no es una Doula, sino una Matrona o una Partera tal vez. 

Quizás alguien te haya trasladado que puedes estar acompañada en tu parto por un/a profesional que no es profesional sanitario ni está formad@ en atención al parto, pero esa figura que de la que te han hablado en ningún caso es una Doula, pues las Doulas no tenemos papel "activo" en los partos. No podemos valorar como evoluciona aunque nos lo pidas, ni mirar tu dilatación aunque quieras que lo hagamos, ni evaluar tu estado de salud o el de tu bebé durante el parto para poder trasladarte si algo está saliendo de la seguridad habitual del proceso de parto fisiológico con toda la información y que puedas decidir y tomar las riendas. 
Todo eso lo hacen l@s profesionales que lo tienen como misión, que están formad@s para ello y que asumen esa responsabilidad y papel en los partos: Matronas, Ginecólog@s y/o Parteras, dependiendo del país en el que te encuentres y la disponibilidad de profesionales que tengas. 

La Doula que acompaña un parto en el que no se encuentra ese tipo de profesional no está actuando dentro de la buena praxis profesional, sino que está tomando un papel que está lejos de ser el que nos corresponde, un papel activo que va contra el acompañamiento en sí.
Acompañar es estar a tu lado, junto a ti mientras recorres tu camino y tomas tus decisiones. Nunca puede implicar tomar responsabilidad alguna en tu maternidad, nunca puede implicar aconsejarte, nunca puede implicar que dependas de mi... nunca puede implicar que yo actúe influyendo activamente en tu parto o tu maternidad porque sería como tomar parte de ella, y es solo tuya.

La Doula acompaña tus decisiones y caminos, y para ello hemos de respetarlos. Y créeme que yo respeto la opción libre y consciente que tomas en este momento en el que decides no contar con un/a profesional sanitari@ en el momento de tu parto. Y, a la vez, respeto lo que implica el acompañamiento real y también mi trabajo como Doula. Y es por estas dos últimas cuestiones por las que me veo obligada a decirte que no... que no puedo estar en tu parto como Doula aunque me encantaría vivir ese momento tan especial contigo y con tu familia como deseabas que hiciera.

Por eso te escribo a ti, mujer. Que quizás encuentres alguien que te diga que es Doula y acepte acompañarte sin ningún tipo de personal sanitario a tu lado. Y puede hacerlo por mil motivos: que no te sientas sola, que puedas sentirte arropada en tus decisiones, que no puedas sentir que no respeta tu decisión, tal vez esa persona que se hace llamar Doula no tiene claro lo que significa acompañar de verdad o la creencia de que haciéndolo no está tomando parte de tu parto... pero lo está haciendo. Y eso, querida mujer, no es un acompañamiento de Doula. 
Puedes llamarlo Partera si quieres, o de cualquier otro modo. Pero no es una Doula la que hace eso. 

Por eso, si buscas una Doula de verdad, que sepas que no te acompañará en tu parto si no hay un/a profesional formad@ en la atención al parto junto a ti. 

Por eso, si buscas una Doula de verdad, si lo que sientes que necesitas es el acompañamiento de una Doula, aquí me tienes sin duda. 


Un enorme abrazo. 

Bea Fernández.

No hay comentarios:

Publicar un comentario